El telescopio James Webb (JWST) desafía una vez más la Cosmología con el Descubrimiento de Galaxias Tempranas Masivas.
JWST ha detectado tres galaxias de proporciones colosales, que se apodaron “monstruos rojos”, que florecieron en el universo primitivo, apenas mil millones de años después del Big Bang.
Dicho hallazgo sacude los cimientos de las teorías tradicionales sobre la evolución galáctica, ya que dichas galaxias alcanzaron una masa comparable a la de la Vía Láctea en un tiempo récord.
Lo que más intriga a los científicos es la asombrosa eficiencia con la que estas galaxias transformaron la materia en estrellas.
La existencia de estos monstruos rojos plantea interrogantes cruciales sobre los mecanismos que impulsaron la formación galáctica en el universo temprano.